lunes, 12 de septiembre de 2016

THE PLAGUE WITHIN EUROPE 2015

PARADISE LOST + LUCIFER
05-11-15, Sala Salamandra 2 (Barcelona)


Como es habitual cada vez que los británicos Paradise Lost lanzan un nuevo trabajo, en su gira presentación nunca falta una visita a nuestro país. Con su nuevo ‘The Plague Within’ han revolucionado a todos aquellos que hemos seguido su trayectoria debido a esa vuelta a los sonidos lentos, a las voces rasgadas,…o en definitiva, a sus raíces. Y pese a que cada vez que los de Halifax nos visitan congregan a gran cantidad de gente, en esta ocasión la sala Salamandra rozaba el lleno.

Cuando vimos que los germanos Lucifer eran los teloneros de Paradise Lost durante toda la gira Europea, fue un indicio más de que los de Halifax sabían que con su vuelta a los inicios habían reconquistado a sus viejos seguidores, y pensaron en ofrecerles un motivo más para verles en directo: un grupo de Stoner/Doom como teloneros. Lucifer, con tan solo un par de años de creación y un recién editado debut, han conquistado a muchos seguidores del género de todo el mundo, y la expectativa por verles era alta.

Lucifer se esforzaron todo lo que pudieron, con la frontwoman Johanna Sadonis muy atenta con el público durante toda la actuación, pero la inexperiencia les jugó una mala pasada. Y es que pese a su constante entrega, la voz de Johanna estaba totalmente agotada; no es que desafinara constantemente (aunque sí lo hizo en ocasiones), más bien se notaba que le podía el agotamiento vocal de llevar más de siete semanas de gira. Pese a este gran hándicap que ennegreció su actuación, su dosis de Stoner con pinceladas Doom caló entre alguno de los asistentes allí presentes mientras presentaron su debut ‘Lucifer I’, con canciones como “Morning Star”, “Annubis” o el single “Izrael”.

Una muy buena puesta en escena, una indudable entrega, pero la falta de experiencia realizando extensas giras melló en ellos. Además, bajo nuestro punto de vista y pese a que la idea de traer un grupo de este género sea buena, quizá no fue acertado del todo porque, en ocasiones, se escuchaba más el murmullo de los asistentes sociabilizando que prestando atención al combo alemán. Vamos, que no convencieron.



Con un poco de retraso según la hora anunciada del inicio de la actuación, salieron a escena los protagonistas de la noche: Paradise Lost. Los primeros y pesados riffs de “No Hope In Sigh”, canción que abre su último ‘The Plague Within’, hicieron que el público asistente enloqueciera, y es que si este último largo ha cosechado muy buenas críticas entre los medios especializados, también lo ha hecho entre sus seguidores; y prueba de ello es el casi lleno en la Sala Salamandra de Barcelona, así como otras fechas de la gira en las cuales han colgado el cartel de sold out.

No hay vez alguna que, cuando se habla del directo Paradise Lost, se mencione a Nick Holmes. Y es que es un cantante que cumple perfectamente en estudio, pero es muy irregular en directo. Del sinfín de veces que hemos podido ver a los de Halifax en directo, tanto en sala como en festivales, sobran los dedos de una mano para contar las que no nos ha decepcionado. Así que en cuanto abrió la boca para empezar a cantar “No Hope In Sigh”, todos estábamos expectantes para saber si en esta ocasión Nick iba a estar a la altura o no, ¡y más que es una canción en la que se combina tanto las voces limpias como rasgadas! Pero cumplió, aunque con una pequeña ayuda que pudimos confirmar conforme avanzaba la velada.

La actuación se centró en repasar este nuevo trabajo y es que, tras 27 años de carrera, es lógico que, aunque toquen algún clásico porque se vean ‘obligados’ con el público, decidan dar prioridad al nuevo lanzamiento. Es por ello que pudimos escuchar en directo gran parte de las canciones que componen ‘The Plague Within’, curiosamente las que ofrecen la faceta más doomster y recuerdan a los inicios el grupo, como son “Terminal”, “Victims of the Past”, “Flesh From Bone” con moshpit incluido (lo nunca visto en un concierto de Paradise Lost), y “Beneath Broken Earth”. Pudimos vivir de primera mano el espectáculo que ofrece Gregor Mackintosh a la guitarra, la ya habitual sosería de Stephen Edmondson al bajo (con bostezos incluidos, aunque como os comentamos en la entrevista que le realizamos antes de su actuación, él mismo afirmaba estar agotado y su cuerpo así lo confirmaba), los saltitos de Aaron Aedy mientras toca la guitarra, al jovencísimo Waltteri Väyrynen a los parches en lugar de a Adrian Erlandsson (ocupado con sus quehaceres junto a At The Gates), y lo que nunca habían visto mis ojos: Nick Holmes siendo simpático y haciendo monólogos. Si no lo veo, no lo creo. Un grupo que siempre ha sido frío en directo, sin apenas teniendo contacto con el público y, desde que Holmes ha estado actuando con Bloodbath y empezó a interactuar con los asistentes, ¡ahora también lo hace con su grupo principal y antes de cada canción! Un punto, y merecido, para Nick Holmes.

Por supuesto, hubo tiempo para rememorar antiguas canciones del grupo, clásicos que nunca fallan como son “Erased”, “Enchantment” y “As I Die”. Sorprendentemente pudimos escuchar “Widow” del ‘Icon’, una canción no muy dada a ser tocada en sus conciertos, así como “The Paintless” del ‘Gothic’, otra rareza que suele estar fuera de sus set-lists habituales. Otro de los aspectos que sorprendió fue que no ejecutaron ninguna canción del anterior ‘Tragic Idol’ pero sí hubo lugar para dos de las composiciones de ‘In Requiem’, como fueron “Praise Lamented Shade” y “Requiem”. Conforme el concierto fue avanzando y el sonido mejorando, pudimos afirmar esas pequeñas sospechas de que Nick Holmes obtiene ayuda, a nivel vocal, de los samplers que fueron disparando. Poniéndonos serios: aquellos que hayan visto a Paradise Lost en directo saben que Nick Holmes no brilla por su registro vocal. Y, por supuesto, tras una extensa gira de siete semanas, es normal y completamente humano que su voz pudiera estar desgastada. El problema de Holmes, y de allí la crítica, es su actitud al respecto. Ya no solo porque no sabe ni disimular cuando precisaba de la ayuda de los samplers, se le juzga por bocazas. Si en Bloodbath no hubiera hecho el paripé de quejarse de que le critican por hacer voces rasgadas, con muchos comentarios fuera de tono e innecesarios, no criticaríamos el hecho de que precise ayuda en el directo. Es estupendo que sepa ver y aceptar las carencias vocales que tiene, mayormente al hacer voces limpias, pero está de más ir con esa actitud tan chulesca que, sobretodo, mostró en Bloodbath. Y pese a todo, Nick desafinó en más de una ocasión. Pero se le perdona y se le seguirá perdonando si sigue haciendo buenos directos e interactuando con el público, aunque debería bajar esos humos. Y dicho esto, llegamos al final del concierto.

Como era de esperar, hasta el mismo Holmes lo comentó, volvieron a escena para el colofón final formado por cuatro canciones. Me pareció estupenda la elección de “Return of the Sun”, canción que cierra ‘The Plague Within’, para empezar el fin de una actuación con la magnificencia que aportan las trompetas y el coro. Le acompañó “An Enemy of Lies”, del mismo largo, y “Faith Divide Us – Death Unite Us” del disco de nombre homónimo. Por supuesto, y como viene siendo habitual, el cierre fue a ritmo de “Say Just Words”, que tras 18 años sigue enloqueciendo a los seguidores de los ingleses. Mejor cierre, imposible.


La hora y media de actuación pasó volando y tan solo había que ver la sonrisa de los asistentes para ver que todos los allí presentes disfrutamos con esta visita de los ingleses. Además, da gusto ir a eventos entre semana que finalizan tan temprano que hasta uno puede sociabilizarse antes de coger el transporte público e ir a casa. Conciertos como los del pasado 5 de Noviembre en Barcelona deberían ser más habituales en el día a día de un grupo del calibre de Paradise Lost. Esperemos que de cara al nuevo trabajo (tal y como nos comentó Stephen verá la luz, aproximadamente, en 2017) sigan manteniendo este buen hacer cuando interpretan sus composiciones encima de un escenario. Tienen la trayectoria, más que suficiente, para estar siempre a la altura y no cometer fallos.



12 Nov' 2015

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